¿Quetzaltcóatl o Kristo?

¿Cristo o Quetzalcóatl?
Es la pregunta que se formula Carlos Fuentes en su obra El Espejo Enterrado (México, 2007, Taurusaguilar, 590 págs). Y asegura que la redención de la humanidad por Cristo es lo que fascinó y realmente derrotó a los indios del Nuevo Mundo.

«El verdadero regreso de los dioses fue la llegada de Cristo». (Pág. 207) A la llegada de los europeos los nativos pensaron que era Quetzalcóatl quién volvía. Carlos Fuentes afirma que «El resultado fue una mezcla religiosa de fe cristiana y fe indígena. Y sin embargo existe un hecho llamativo. Todos los cristos mexicanos están muertos, o por lo menos, agonizan».

Desde entonces los nativos de la América hispana permanecen sometidos al «Hágase la voluntad de Dios», «Si Dios quiere», «son cosas de Dios» y el «Oh my God» convertido en modismo usual común y corriente sin tener en cuenta la admonición de no mencionarás el nombre de dios en vano… En otras culturas no se registran imágenes, y menos el rostro de la deidad, y en cuanto al nombre ni siquiera se atreven a pronunciarlo...

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